miércoles, 18 de enero de 2012

el despertador sonó haciendo la volver a la realidad, se levanto lentamente, se dirigió a la ducha y dejo correr el agua... mientras se quitaba el camison se miraba en el espejo, y pensaba en que algún día esa pálida piel podría coger color mientras paseaba por la playa... jamas había visto el mar de cerca, deseaba poder mojar sus pies, mientras las olas iban y venían a la orilla.
Se duchó, se vistió, se puso su mascarilla y bajo a la calle, el taxi que había pedido por teléfono ya la esperaba en la puerta, le dio la dirección y salieron hacia allí.
La consulta estaba en un edificio alto, acristalado, donde el sol se reflejaba de manera que en lugar de uno parecían cientos de ellos.
Subió a la quinta planta y le dijo su nombre a la recepcionista, una chica rubia que la miro con cara de sorpresa al verla llegar con su mascarilla, jamas se acostumbraría a esas miradas insidiosas de la gente... la chica era la típica rubia con grandes pechos, que como decían era la primera imagen que tenia alguien al llegar, no le gusto nunca eso, que la gente solo se fijará en el físico de las personas, quizás por que ella jamas podía enseñar su rostro al completo a nadie al llevar siempre su mascarilla, algo que la hacia sentirse demasiado mal para ponerse a pensar en ello.
La hizo pasar a la sala de espera, su cuerpo ya estaba cansado y solo hacia media hora que estaba en el exterior, sabia que cuando le visitará el medico quizá tendrían que ayudarla a entrar porque su debilitado cuerpo no aguantaria demasiado....

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